Tras tres meses sin escribir ni publicar ninguna reseña, temo que se me haya olvidado escribir reseñas (o incluso escribir en general, quién sabe,) [✿], así que he decidido llenar octubre de recomendaciones (y menciones) variadas y múltiples, con el maravilloso comodín que algún sabio influencer inventó cuando la palabra influencer todavía no existía: tags.
No sé porqué se llama «etiqueta» a este formato de publicación, pero consiste en contestar preguntas que se ha inventado otra persona.
Hice uno por primera vez hace unos meses (cuando todavía sabía escribir) en el balance de lecturas de la primera mitad de 2020. Fue algo que antes de hacer me parecía una chorrada, pero que me sorprendió gratamente porque me divertí mucho con ella: hablar de 200 libros en general en vez de hacer 2000% de zoom en un libro concreto, algo que me encanta pero que a menudo me deja con el cerebro exhausto; hacer las fotitos; aprovechar cualquier excusa para fingir que la autora de Harry Potter no existe… Y, total, la cuestión es hablar de libros.
Así que, si Zeus quiere, a lo largo de este mes aparecerán en May Lee Cosas tres tags relacionados con el otoño (aquí está el primero, aquí el segundo y aquí el tercero), ya que es el tema que se estila a estas alturas del año en el hemisferio norte y yo también quiero parecer cool y decir que bebo Pumpkin Spice Lattes, a pesar de que no he probado uno en mi vida.
Y, tras el momento de adoración otoñal, quiero hacer un post de recomendaciones de libros de terror (así, gratuitamente, sin contestar a las preguntas de nadie, a lo loco) que publicaré una semana antes de Halloween (para que, si alguien quiere leer por razones Halloweenescas alguno de los libros mencionados, tenga tiempo de hacerlo antes de que se acabe lo que los angloparlantes llaman Spooky Season [☆], lo puedes encontrar aquí).
Finalmente, para cerrar el mes y exprimir Halloween un poco más, el 31 de octubre subiré, esta vez sí, un tag de Halloween (en el que la naturaleza de las preguntas no lleva a hablar de libros de terror necesariamente; y es que la gracia de los tags es que las preguntas son temáticas, pero las respuestas que invitan a contestar no). Puedes leerlo aquí.
[✿] Eso o que no sé de dónde sacar el tiempo para escribirlas porque este año estoy cursando más asignaturas que unidades de autoestima tengo.
[☆] Pido disculpas por los manchurrones de spanglish, pero soy medio filóloga, no medio traductora.
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